Chianne Hall

Me llamo Chianne, y muchos me conocen como Chi. Durante mi infancia, mi familia y yo tuvimos muchas mascotas. Aves, conejos, cobayos, perros y gatos, por nombrar algunos. Mi primer perro, Coco, me inspiró para estudiar y convertirme en asistente veterinaria certificada o CVA. Con su fallecimiento, no tuve la mejor experiencia en un consultorio veterinario. Esto me permitió pensar y preguntarme lo siguiente: "¿Cómo puedo hacer un cambio?". Decidí unirme al campo para ofrecer a todos nuestros pacientes y clientes la mejor experiencia posible. Amarlos y aceptarlos con los brazos abiertos y crear un entorno libre de miedo. Disfruto de establecer conexiones con todos los clientes y sus bebés peludos; y escuchar historias divertidas sobre las travesuras cotidianas de las mascotas me hace sonreír.