mantener a las mascotas seguras en el hogar
Antiguamente, antes de que tuviéramos mascotas como mejores amigos y de que existieran los masajes para gatos y las guarderías para perros, los ancestros de nuestros perros y gatos vivían en estado salvaje. Era peligroso. Había riesgos, depredadores, muy bajas temperaturas, escasos alimentos, plantas venenosas…
En la actualidad, ser perro o gato probablemente sea más fácil (o al menos más seguro). Al fin y al cabo, nosotros los seres humanos nos ocupamos todo el tiempo de su salud y bienestar. Los amamos, los acariciamos y nos aseguramos de que reciban cuidado preventivo de mascotas con regularidad. Algunos incluso vamos un poco más allá y les preguntamos con cariño si quieren jugar, les tejemos suéteres a nuestras mascotas o dejamos que duerman sobre nuestras almohadas. O todo eso junto.
Por lo tanto, en general, la vida es más cómoda y menos peligrosa. Excepto en lo que respecta al veneno. Más aún, la vida doméstica de las mascotas en este mundo dominado por los seres humanos puede exponer a perros y gatos a un mayor riesgo de intoxicación.
Cuidado con las toxinas domésticas
¿Por qué actualmente existen más posibilidades de intoxicación en mascotas? Porque traemos todo tipo de productos peligrosos a nuestros hogares. De la farmacia. Del supermercado. Del vivero. La mayoría de estos productos mejoran nuestras vidas, pero algunos pueden poner en riesgo a nuestras mascotas.
A continuación, presentamos una lista breve de productos con los que hay que tener cuidado, mantener bajo llave o descartar por completo. La lista no es exhaustiva, pero te sentirás mucho mejor si controlas estos riesgos.
Medicamentos en el hogar, incluido el Tylenol, medicinas con receta para seres humanos o incluso para otras mascotas, agentes liporreductores, suplementos para seres humanos, antidepresivos; y esto es solo la punta del iceberg.
Químicos domésticos, como anticongelante, pesticidas, destapacañerías, pintura y diluyente, plomo, brea y otros.
Artículos para el jardín, como trampas con veneno, abono, fertilizantes, insecticidas, rodenticidas y otras soluciones para eliminar plagas del jardín.
Plantas (de interior y exterior), incluidas las especies tóxicas del patio como el narciso de otoño, la palma de iglesia, las azaleas, los lirios, los tulipanes (!), las plantas tóxicas del hogar como los lirios de Pascua, filodendros, la flor de Pascua y muchas otras.
Productos y alimentos para seres humanos, como chocolate, ajo, alcohol, granos de café y productos con cafeína, hongos, alimento para bebés, productos lácteos, cannabis… y muchos otros.
E incluso cosas que arrojamos a la basura, como viejas esponjas de cocina, carozos de durazno y otras cosas que las mascotas no deberían comer, pero que desean comer.
Puedes encontrar una lista más extensa de toxinas domésticas comunes en banfield.com. Es de lectura obligatoria para los amantes de las mascotas. Y mantén siempre los productos tóxicos del hogar bajo llave o fuera del alcance de tu mejor amigo.
Lo que debes hacer si tu mascota se ha intoxicado
Si sospechas que tu mascota ha comido algo venenoso, informa a tu hospital veterinario de emergencia o llama a la línea de envenenamiento de mascotas al 1-800-213-6680. El envenenamiento se debe tratar de inmediato, así que, cuanto antes recibas ayuda, más probable será que podamos ayudarte.
Esperamos que nunca necesites usar ese número. Pero es bueno tenerlo en el teléfono, por si acaso.
Además, recuerda que, si tienes preguntas sobre cómo prevenir y reducir los riesgos para tu mascota, tu equipo veterinario de Banfield está a disposición para ayudar.